Tazio Nuvolari; hèroe de las pistas!

El hablar de Tazio, es el rebuscar en la leyenda, el inicio del automobilismo competitivo,
èsta historia, tiene mucho de gloria y de dolor, y se encuentra legada a personajes como,
Francesco Baracca, Enzo Ferrari, Karl Abarth, y tal vez incluso nuestro poeta nacional,
y paladino de la primera guerra mundial, Gabriele D'Annunzio!
Nuvolari(1892-1953), fue un Padano, es decir ciudadano ilustre de esta tierra,
de embrujo Celta, motor de la revoluciòn tecnològica italiana, cruzada por el sagrado,
rìo Po! Sì fuè un Padano, que como todo jòven del tiempo fue obligado a ir en guerra,
aquel suicidio llamado; primera guerra mundial; Tazio conociò de cerca los motores,
porque fue asignado al reparto motorizado del ejercito, se enamorò de las motocicletas,
luego con un poco de fortuna, salvo del conflicto, deseò inscrivirse como piloto profesional,
de motocicletas de carrera; corrìa con una Fongri!
Ganò lo poco que podìa ganar en aquel tiempo, donde habìan poquìsimas competencias,
profesionales; descubriò al poco tiempo el automòbil, corriendo sea con la moto, que con el auto!
Pero luego se profesionalizò con las 4 ruedas; lo que ganò Nuvolari es increìble,
no sòlo en Italia, sino tambièn en: Bèlgica, Francia, Inglaterra, Alemania, Yugoslavia,
Mònaco, Hungrìa; en Italia fue el campiòn indiscutible de las mìticas Mille Miglia,
que cruzan los Apeninos desde Brescia en Lombardìa, hasta la Laziale Roma!
Hizo suya tambièn la Targa Florio, y la Copa Andrea Brezzi entre otras!
En Alemania a Nurburgring-1935; Nuvolari gana sin competencia ante los ojos atònitos,
de Hitler, con una Alfa Romeo; no sòlo era un piloto no Ariano, sino incluso l'auto era latina!
Nuvolari sabìa de la locura nazista, porque habìa ganado otras veces en el paìs Germànico,
y al momento de la premiaciòn le izaban una bandera tricolor descolorida, y en lugar de la Marcha Real(himno nuestro en aquel tiempo cuando la Italia era aùn un reino), le hacìan sonar, O Sole Mio, una canciòn Napoletana, que no tenìa nada que hacer, asì que nuestro Padano,
no sòlo llevò su bandera, sino que tambièn una bufanda tricolor al cuello, que serà al lado,
de los mìticos pantalones azzurro Mediterraneo, la maya de lana Amarilla,
su amuleto de victoria, y su mortaja despuès!
Nuvolari al inicio corriò con muchos autos, hasta que conociò Enzo Ferrari,
quien le hizo de copiloto en pasado, y quien fuera tambièn corredor,
Ferrari comenzo con el sueno de realizar su propia escuderìa, pero al no tener medios,
le ofreciò a la Alfa Romeo, de preparar sus autos para las carreras, Ferrari,
con nada en el bolsillo, pero con una capacidad increìble de convencer a la gente,
y de motivarla segùn èl para alcanzar la gloria, le hizo a Nuvolari firmar un contrato,
casi eterno, y Tazio con sus victorias hizo a Enzo, el fabricante de autos deportivos màs famoso,
del mundo!
En una etapa de las Mille Miglia; Tazio hizo hacer de copiloto a Ferrari, deseaba observar,
de que estaba hecho el jefe, cuenta Enzo, que Nuvolari no usaba los frenos, era todo un juego,
de direcciòn, es decir reducìa la velocidad en curvas sòlo soltando el acelerador, y moviendo,
el volante de modo brusco a ambos lados, haciendo el auto andar en tres ruedas,
Ferrari no lo podìa creer,y pensò de morir durante la extensa carrera, se impusieron,
con la potente Alfa Romeo, porque dieron inseguimiento por la noche al primer corredor,
con los faros apagados como rayos en una tormenta, siguiendo sòlo las luces posteriores,
una cosa de locos, Ferrari se convenciò del valor de Tazio,
pero no correrìa jamàs con èl!
En la Andrea Brezzi de Torino, Nuvolari terminò ganando, con el volante roto al ùltimo giro!
En Monaco, cruzò la pista incendiada luego de un accidente, pasò por las llamas sin inmutarse,
con un sangre frìo escalofriante!
Nuvolari hizo Ferrari, pero jamàs condujo uno; Ferrari recibiò el sìmbolo del caballo rampante,
de la madre de Francesco Baracca, un nuestro As de la aviaciòn militar que usò como amuleto el caballo rampante, Ferrari no li rindiò el homenaje al hèroe del automobilismo,
se lo rindiò Alfa Romeo, Vincenzo Lancia, Karl Abarth, y el pueblo italiano!
Vincenzo Lancia le regalò la prima LAncia Aprilia, auto que Nuvolari mitificò!
Karl Abarth, lo hizo socio de la Cisitalia-Abarth, lamentablemente quebraron,
pero Nuvolari ganò su ùltima carrera en un Abarth 204, fue en Sicilia y Nuvolari,
tenìa 58 anos en el 1950; Tazio tenìa el cuerpo todo roto, fruto de su vida agonìstica,
su ùnica gloria y felicidad fue el autobilismo, en el 1950, se iniciò oficialmente,
la formula Uno, y pilotos como Ascari y Fangio, futuros campiones de la F1,
lo consideraron el maestro ente los maestros; al dejar los autos, Tazio, se encontrò,
sòlo con la mujer que amaba sin sus dos hijos que murieron de extranas enfermedades,
en pasado! Era la fin para una leyenda, un ìctus se lo llevò en el 1953!
50000 personas afolaron su pueblo, no se recuerda algo màs commevedor, su esposa,
lo vistiò para su ùltima carrera, aquella de la eternidad, montaron el fèreteo,
sobre un auto sòlo en chasis, y con sus pantalones azules, su maglia amarilla,
y su bufanda tricolor saludaba a su pueblo, a la Padania y a l'Italia que lo conociò incluso,
en la tierra de los caminos sicilianos!
Monumentos y calles llevan su nombre, pero èl fuè el màs veloz, y no sòlo, fuè el mejor,
a diferencia de Ferrari, quien llegò tarde al funeral!
Gabriele d'Annunzio quien lo viò competir contra un aviòn Caproni ca. 100,
della aeronàutica militar, èl(Nuvolari) en un Alfa Romeo 8C 2300, a una velocidad de màs,
de 300km orarios, un rècord mundial, un orgullo italiano, Mussolini al lado de D'Annunzio,
no aplaudieron, corrieron a abrazarlo y besarlo!
D'annunzio; el poeta; el ex aviador y amigo de Baracca, dijo de Nuvolari:

Ovvunque tè vai, la natura si ferma, i fiumi ti lasciano passare, il vento ti saluta, e gli uccelli,
imparanno da tè!

Donde sea vos andàis, la naturaleza se detiene, los rìos te dejan pasar, el viento te saluda,
y los pàjaros aprenden de tì!